Psicología infantil: Qué es, técnicas y trastornos que trata

El periodo de la infancia es entendido como una etapa caracterizada por la incapacidad para expresar las necesidades que se tienen. Este hecho enfatiza la presencia de disponer de profesionales capacitados en esta área que establezcan cauces de comunicación. Por ello, te recomendamos cursar un Máster en Psicología Infantil y Juvenil con el que puedas adquirir aquellos conocimientos y habilidades más específicos en el desarrollo infantil.

¿Qué es la psicología infantil y que estudia?

Comenzaremos por definir el concepto más amplio de psicología para poder entender qué es la psicología infantil.  La psicología es una disciplina enfocada a la comprensión y al análisis del comportamiento y la conducta así como igualmente a los procesos mentales del individuo y los grupos sociales. En este contexto, la psicología infantil concentra su estudio al comportamiento y desarrollo del niño/a desde que nace hasta su adolescencia. Esta rama de la psicología trata de comprender y atender a todas las esferas de evolución del niño/a: los aspectos motores y físicos, sociales, cognitivos, perceptivos y afectivos. La finalidad será mejorar la calidad de vida, y proporcionar a los niños/as una infancia feliz y saludable, como también atender los miedos o alteraciones que puedan aparecer en esta etapa a través de la psicoterapia infantil.

A grandes rasgos podemos decir que la psicología infantil atenderá dos vertientes fundamentales:

1. El ambiente. Los niños/as son curiosos por naturaleza, y se encuentran inmersos en un amplio espectro de estímulos con los que interaccionan. Las relaciones establecidas y la influencia de estas influirán en los procesos de desarrollo y aprendizaje del mismo.

2. La biología. Cada ser humano nace con una determinada genética que determinará ciertas características en el proceso de desarrollo. 

¿Qué hace un psicólogo infantil?

El psicólogo infanto-juvenil es el experto en la terapia infantil y en el tratamiento psicológico en estas edades. Para explicar la conducta del menor, aplicará psicoterapia a nivel individual y también familiar, que ayuden a diagnosticar y tratar problemas psicológicos. Los procesos de desarrollo exigen al psicólogo clínico infantil dominar las siguientes actuaciones:

a) Labor de investigador para la identificación del problema, mediante conocimientos generales que sobre el fenómeno del desarrollo infantil.

b) Su labor como orientador que deberá realizar una vez identificada la causalidad general del problema. Como consecuencia de ello, la labor terapéutica en general.

La evaluación psicológica en la etapa de educación infantil

La evaluación integra observación y recopilación de datos, como proceso continuo que transcurre durante todo el tiempo de evaluación e intervención. La evaluación ha de cumplir las siguientes características:

a) Contextualizada

b) Dinámica y multivariable al problema presentado 

c) Sistémica. 

d) Que permita establecer interrelaciones.

Psicoterapia infanto-juvenil: Diagnóstico para solucionar los problemas de desarrollo infantil

El psicólogo de niños/as realizará la exploración psicológica con el fin de llegar a un diagnóstico y orientar un tratamiento concreto y personalizado. Para ello necesitará obtener información de múltiples fuentes: observación, test psicométricos, familia, etc. 

Asesoramiento psicológico para niños y padres

La terapia psicológica infantil incluirá como parte activa del plan de tratamiento a las familias; su participación e implicación en todo el proceso influirá decisivamente en los resultados. La función orientadora e informativa en esta etapa es esencial.

Técnicas psicológicas que utiliza un psicólogo infantil

La intervención infantil suele fundamentarse en el plano lúdico como principal herramienta, a través de éste el niño aprende como funciona su mundo y vuelca sus sentimientos en él facilitando la expresión de sus emociones.

-La terapia cognitivo-conductual (TCC)

Se centra en modificar los pensamientos y sentimientos analizando las pautas y comportamientos de los niños/as para ayudar a entender cómo piensan y cómo actúan.

-La terapia sistémica

Son modelos muy flexibles que se caracterizan por incluir en la intervención diferentes sistemas o ambientes de interacción, preferentemente la familia. 

-El psicoanálisis infantil

Fundamentada en la mente y el inconsciente del niño/a como vía para esclarecer los problemas emocionales.

-Terapia lúdica

La herramienta de esta terapia es el juego, entendido este como herramienta para explorar el desarrollo y los mecanismos de afrontamiento y expresión emocional/social. 

Problemas y trastornos que tratan los psicólogos infantiles

La depresión infantil se manifiesta con una tendencia de falta de interés en el juego y su relación con el entorno, acompañado de sentimientos de inutilidad y desesperanza.

Entendida esta como una alteración del neurodesarrollo que afecta a la forma en la que estos niños/as perciben y se relacionan con su entorno: presentan déficit en las relaciones sociales y en la comunicación verbal y no verbal.

Caracterizado por una conducta negativa hacia las figuras de autoridad, con comportamientos desafiantes, enfadados o incluso vengativos.

La enuresis se manifiesta por una emisión involuntaria y repetida de orina, frecuentemente durante la noche y presenta un pronóstico de éxito a medida que el niño/a crece.

El síntoma predominante del TDAH incluye un patrón persistente de falta de concentración/atención e impulsividad, acompañado de problemas académicos.

El acoso escolar o bullying engloba un conjunto de comportamientos agresivos, repetitivos en el tiempo y de forma intencionada, con una diferencia de poder o fuerza entre ambas. Estas acciones provocan daños a corto y largo plazo.

En la ansiedad infantil se produce lo que denominamos como “somatización” y se caracteriza por presentar náuseas, vómitos, problemas respiratorios o temblores. Este problema sucede a menudo ante una separación y nueva pareja de los cuidadores primarios.

Encuadrada dentro de las fobias específicas, se manifiesta a través de un temor excesivo e irracional a asistir al colegio. 

Como un estado más de nerviosismo, los tics son movimientos o sonidos estereotipados y repetitivos que no persiguen ningún objetivo. En situaciones de estrés, cansancio o irritabilidad tienden a aumentar su frecuencia.

En los niños/as, existe una mayor cantidad de situaciones que pueden causar TEPT en comparación con los adultos y ocurre tras experimentar un suceso aterrador o traumático, de entre los cuales se destacan: abuso y negligencia infantil, intervenciones médicas, accidentes o violencia, pérdidas de seres queridos o adopciones.