Intervención Educativa: Que es, tipos y cómo aplicarla en el aula

La realidad educativa actual demanda no solo de los profesionales docentes, sino de la comunidad educativa en general, la urgencia de analizar y valorar las necesidades de un alumnado cada vez más diverso y heterogéneo. Cualquier aproximación de mejora conlleva poner en práctica estrategias de intervención educativa, que partan de una reflexión completa y en profundidad del alumnado y sus diferentes contextos. La renovación educativa no es arbitraria, se necesitan conocimientos especializados en el área, por lo que una formación como el Máster en Análisis de Conducta Aplicado e Intervención Educativa capacitará multidisciplinarmente para esta carrera profesional.

¿Qué es y cuáles son las principales características de la intervención educativa?

Antes de responder a que es la intervención educativa, nos detendremos en la primera parte: la intervención. Cuando hablamos de intervención, hacemos referencia al conjunto de acciones o modos de proceder que tienen como objetivo obtener o generar un cambio. Los cambios esperados se pueden traducir en términos de conocimientos, actitudes o prácticas, que serán susceptibles de ser evaluados antes y después de la actuación.  

Entendido esto, la intervención educativa engloba los desempeños y prácticas en diferentes esferas (pedagógica, motivacional, metodológica, etc.), para seguir un programa o plan de intervención educativa basado en las necesidades detectadas y previamente diseñado para alcanzar los objetivos propuestos. Sus características principales son las que siguen: 

-Objetivos: la línea de intervención se encuentra marcada por los objetivos propuestos, que responderán a las necesidades detectadas. 

-Temporalidad: contextualizado en el tiempo y espacio.

-Abiertos y flexibles: aceptan modificaciones y cambios.

-Personalización: el plan de actuación se adecuará al alumnado receptor y sus peculiaridades.

-Evaluación: como proceso inherente a la actuación y seguimiento del desarrollo del mismo.  

¿Qué tipos de intervención educativa existen?

Podemos organizar el amplio espectro de actuaciones en tres grandes tipos de intervención educativa:

-Intervención educativa: integraría todas aquellas acciones que ponen en práctica las estrategias necesarias para seguir un camino educativo que persiguen unos objetivos marcados en el ámbito académico. 

-Intervención conductual: englobaría aquellas actuaciones de intervención educativa en el alumnado con trastornos de conducta, comportamientos inadaptados o no adecuados al correcto funcionamiento del aula, para minimizar y/o eliminar comportamientos disruptivos que dificulten la consecución adecuada de los objetivos e interfieran en el proceso de enseñanza-aprendizaje. 

-Intervención emocional: las emociones empleadas como pilar básico de cambio y transformación en el alumnado de cara a la consecución de objetivos, como elemento enriquecedor y de apoyo a la intervención educativa. La intervención emocional persigue la mejora de la inteligencia emocional, autoestima, autoconcepto, etc.

¿Cuándo se necesita una intervención educativa?

La intervención educativa no solo presenta un carácter reactivo (de intervención directa hacia la dificultad), sino proactivo, como elemento de prevención, mejora y desarrollo de las capacidades del alumnado. Por ello, serán las propias necesidades las que marquen el modelo de intervención educativa a seguir. Por lo que, además de lograr la superación de dificultades detectadas, también se potencian las competencias personales. 

Aunque cada alumnado es único y no se recomienda generalizar, la intervención pedagógica se dirigirá al alumnado con altas capacidades, con diferentes discapacidades, con trastorno del espectro autista, etc.

¿Cómo se desarrolla un plan de intervención educativa?

Para entender mejor, y de forma más práctica, como se articula un plan de intervención educativa a continuación se consideran las siguientes fases:

1. Fase inicial.  Esta primera fase se focaliza en un análisis amplio y riguroso de la situación real de la que se parte, con especial atención a las necesidades y la obtención de datos. Se considera una fase diagnóstica con un predominante carácter de investigación. 

2. Fase de ejecución. La información recabada en la fase inicial guiará la formulación de los objetivos y la toma de decisiones frente a la programación: metodología, temporalización, estrategias de actuación, actividades, recursos humanos y materiales, criterios de evaluación, etc. Una vez realizado el diseño se procede a su aplicación.

3. Fase de valoración.  Lejos de considerarse una fase o elemento final, la evaluación representa un aspecto imprescindible de cualquier plan de intervención educativa. En esta fase se procede a valorar el funcionamiento y desarrollo del programa, así como las incidencias y alcance de los objetivos. Se finaliza con un proceso de toma de decisiones.

¿Cómo la intervención educativa favorece la inclusión en el aula?

Como hemos comprobado, la intervención educativa es bastante más que una estrategia, precisa de un diseño contextualizado a las necesidades académicas y de una continuidad y seguimiento. Por otro lado, la intervención educativa para favorecer la inclusión en el aula ordinaria representa un elemento de atención a la diversidad en el funcionamiento de nuestras aulas. La intervención pedagógica persigue la garantía de equidad para todo el alumnado, atendiendo a las necesidades existentes para asegurar el máximo desarrollo de los mismos. Para hacer efectivo dicho principio, se proponen a continuación diferentes propuestas de actuación en el aula:

-Intervención en la comunicación y mejora de la participación. A través de metodologías activas, aprendizaje basado en proyectos, grupos interactivos, etc., se pretende respetar e integrar la diversidad del alumnado. 

-Aprender a aprender. Con el objetivo de que el alumnado sea el protagonista de su propio proceso de aprendizaje y agente activo en la construcción de los conocimientos.

-El Diseño Universal de Aprendizaje (DUA).  Las intervenciones basadas en el DUA buscan adaptar los saberes básicos a las capacidades y posibilidades de cada alumno, personalizando la respuesta educativa.