¿Qué significa DSM-5 y cómo afecta al Trastorno del Espectro Autista (TEA)?

DSM hace referencia a la siglas Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders, traducido al español como Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales. 

Este manual, utilizado principalmente en Estados Unidos, contiene descripciones, síntomas y material relacionado para diagnosticar trastornos de salud mental, en adultos y niños.

Origen del DSM

El Manual de Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM), creado por la Asociación Americana de Psiquiatría, fue publicado por primera vez en 1952 para describir multitud de desórdenes mentales. 

Desde su publicación, ha sido revisado hasta siete veces, siendo su versión más reciente de 2013, bajo el nombre de DSM-5.

En la versión del año 2000 (DSM-IV-TR), el Manual, hacía una clasificación de los diferentes trastornos mentales, agrupándolos en cinco grupos:

1. Síndromes clínicos. 
2. De personalidad o retrasos mentales.
3. Condiciones médicas.
4. Problemas psicosociales y ambientales.
5. Evaluación global del funcionamiento. 

Versión actual del manual: DSM-5

Como hemos dicho, la versión más reciente de este manual de Diagnóstico de Trastornos Mentales, es de 2013, y está dividido en tres secciones principales:

1. Conceptos básicos del DSM-5. Proporciona pautas para el uso clínico y forense.
2. Criterios y códigos de diagnósticos en los diferentes trastornos recogidos.
   1. Trastornos del neurodesarrollo
   2. Espectro de la esquizofrenia y otros trastornos psicóticos
   3. Trastorno bipolar y trastornos relacionados
   4. Trastornos depresivos
   5. Trastornos de ansiedad
   6. Trastorno obsesivo-compulsivo y trastornos relacionados
   7. Trastornos relacionados con traumas y factores de estrés
   8. Trastornos disociativos
   9. Trastornos de síntomas somáticos y trastornos relacionados
   10. Trastornos de la conducta alimentaria y de la ingesta de alimentos.
   11. Trastornos de la excreción.
   12. Trastornos del sueño-vigilia.
   13. Disfunciones sexuales.
   14. Disforia de género.
   15. Trastornos disruptivos, del control de los impulsos y de la conducta.
   16. Trastornos relacionados con sustancias y trastornos adictivos.
   17. Trastornos neurocognitivos.
   18. Trastornos de la personalidad.
   19. Trastornos parafílicos.
3. Medidas y modelos emergentes

A parte de la estructura, los cambios más significativos fueron:

• La inclusión del trastorno por atracón como un trastorno alimentario (TCA),
• El Síndrome de Asperger pasó a ser parte de los Trastornos del Espectro Autista (TEA)
• El duelo como Trastorno Depresivo.
• Cambio de nombre de Trastorno de Identidad de Género a Disforia de Género.
• Separación de trastornos no especificados en otra categoría en trastornos específicos y trastornos no específicos.

Otra curiosidad es que, el DSM-5, es el primero que no usa números romanos en su nombre.

La primera prioridad de esta nueva versión es que el manual sea útil para diagnosticar y tratar clínicamente a personas con algún trastorno mental.

Cada cambio y revisión deberá ser contrastado y basarse en la evidencia científica.

DSM-V y Trastornos del Espectro Autista (TEA)

Como hemos dicho, ahondando un poco más, uno de los cambios más relevantes fue sobre los Trastornos del Espectro Autista. Estos, en la versión de 1994, estaban asociados como “Trastornos Generalizados del Desarrollo”.

En el DSM-V, esta definición fue sustituida por el término actual “Trastornos del Espectro Autista”, que abarca el Trastorno Autista, el Trastorno de Asperger, el Trastorno Desintegrativo Infantil y el Trastorno generalizado del desarrollo no especificado. 

El Trastorno del Espectro Autista, denominado también autismo típico o autismo nuclear, está incluido dentro de los trastornos del neurodesarrollo. Éstos se manifiestan, normalmente, de manera precoz en el desarrollo, a menudo antes de que el niño/a empiece la escuela primaria, y se caracterizan por un déficit del desarrollo que produce deficiencias del funcionamiento personal, social, académico u ocupacional.

En síntesis, el Trastorno del Espectro Autista se define por la presencia de alteración en la relación social, alteración en la comunicación y espectro restringido de intereses. 

Los criterios diagnósticos del DSM-V para el TEA son:

1. Deficiencias persistentes en la comunicación social y en la interacción social en diversos contextos.
2. Patrones restrictivos y repetitivos de comportamiento, intereses o actividades.
3. Los síntomas están presentes en las primeras fases del período de desarrollo, aunque pueden no manifestarse hasta que se superen las capacidades limitadas.
4. Los síntomas causan un deterioro clínicamente significativo en lo social, laboral u otras áreas e interfieren en el funcionamiento habitual del día a día.

El DSM-5 también hace referencia a tres grados de severidad del Trastorno del Espectro Autista (TEA), basados en, primero, los síntomas que tienen que ver con la comunicación social y, segundo, los comportamientos restringidos y repetitivos. 

1. Nivel 1: necesita ayuda.
2. Nivel 2: necesita ayuda notable.
3. Nivel 3: necesita ayuda muy notable.

Es por esto, por lo que surge la necesidad de detectar cuanto antes estas dificultades, e intervenir en ellas para reducir la gravedad y las repercusiones que puedan tener en las personas que lo sufren. 

Así pues, en el Centro de Estudios de Postgrado EDECA disponemos de formación relacionada con este ámbito, como puede ser el Máster en Trastorno del Espectro Autista o la Doble Titulación de Máster en Trastorno del Espectro Autista + Máster en Atención Temprana.